MÁS COINCIDENCIAS CRISTIANO-EGIPCIAS
Las historias Jesús y Horus son muy similares, con Horus contribuyendo al nombre de Jesús Cristo. Las leyendas de Horus se fechan hace muchos millares de años, y él comparte los siguientes campos en común con Jesús:
· Horus nació de una virgen el 25 de diciembre.
· Él tenía 12 discípulos.
· Lo enterraron en una tumba, y fue resucitado.
· Él era también "El camino, la verdad, la luz, el salvador, hijo ungido del dios, el buen pastor," etc.
· Él realizaba milagros y levantó un hombre, El-Azar-us, de los muertos.
· El epíteto personal de Horus era "Iusa," "el hijo que siempre se convertía" de "Ptah," el "padre."19.
· Le llamaban Horus "el KRST," o el "Ungido," mucho antes que los cristianos duplicaran el cuento20.
. En las catacumbas en Roma hay imágenes del bebé Horus que es sostenido por la madre virginal Isis - la "Madonna y niño" original.
En la imagenes siguientes se puede ver a isis amamantando a osiris en una estatuilla antigua y en una pintura de la época romana. Ambas con grandes similitudes a las madonas cristianas.
El culto a Isis transmigrado de Egipto en Roma cuando llegaron los primeros cristianos estaba muy arraigado y extendido en múltiples capillas, y no solo en Roma sino en cualquier puerto del mediterraneo, dado que pregonaba en sus nuevas versiones romanas la resurección en el paraiso a través de la regeneración de Osiris . Con pequeñas modificaciones se trasladará al cristianismo y desde allí a todo el orbe. No hay nada mejor para explicar algo que hacer un símil, y cambiar lo que procede.... , Neftis, esposa de Seth (Tifón griego, el malo) hermana de Isis copula con Osiris su tambien hermano, Seth se entera y mata a Osiris su hermano, lo corta en pedazos que esparce, Isis recoge los pedazos incluido el falo, y copula con Osiris muerto-renaciendo. De ello nace la salvación Horus, al que Isis cuida y amamanta escondido a los ojos de Seth. Horus recuperará el trono venciendo a (el mal) Seth, Las variaciones son múltiples tantas como templos a lo largo del Nilo. Pablo, perfecto conocedor de la mitología egipcia, y de su popularidad, ante la rotunda negativa a incluir a Jesús como Dios por los judíos en sus basílicas da las órdenes oportunas a los pablistas, aún diferenciando claramente a La virgen Maria en occidente, de reesplicar el ancestral cuento oriental cristianizándolo. La jugada salió perfecta, dado que los judíos no hacen proxelitismo, nada tubieron contra ello fuera de tierra judía, incluso ayudaron a los pablistas confundiéndose con ellos tras la toma de Jerusalén por Tito, y sobre todo a los judios les vino bien en la segunda guerra de los judios, en la que los judíos eran perseguidos (no los cristianos) reconvirtiendo basílicas. En prácticamente dos siglos María había absorbido todas las capillas de Isis.
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